El filme comienza con la voz en off de Juno diciendo: "Todo comenzó con una silla", haciendo referencia al sillón donde tuvo sexo con Bleeker, su novio, concibiendo así a su primer hijo. Pero Juno no es una mujer en busca de la maternidad, sino simplemente una jovencita adolescente que no se cuidó y quedó embarazada. Esta es la premisa de "La joven vida de Juno", de Jason Reitman (conocido aquí por "Gracias por fumar").
La estructura de la historia se presenta en 4 partes, con el comienzo de cada una de las estaciones, desde el otoño hasta el próximo verano, acompañando a la joven y su familia a lo largo de casi un año.
Juno deja afuera del tema a su tímido noviecito del secundario y decide dar en adopción a su futuro hijo y, vía clasificados de diario, conoce a Vanessa y Mark, una pareja que desea fervientemente adoptar un crío, especialmente la mujer.
A lo largo de los meses, a medida que la panza crece, las relaciones entre la pareja adoptiva y la adolescente son cada vez más cercanas, y más entre Mark y Juno, quienes comparten (extrañamente, a pesar de la gran diferencia de edad) gustos musicales y cinematográficos.
El personaje de Juno, si bien está muy bien actuado por la veinteañera Ellen Page, tiene varias particularidades (principalmente sus parlamentos) que la hacen ver como una mujer superada, madura y siempre ingeniosa. Es algo singular que Juno adore únicamente a íconos setentosos, como Patti Smith, The Stooges o Dario Argento, y no porque no merezcan ser admirados, sino que están totalmente fuera de su época. Esto no quiere decir que todo adolescente actual deba adorar a Britney Spears por el hecho de la contemporaneidad, pero resulta algo llamativo al menos. Por otro lado, el hecho de haber quedado embarazada parece nunca asustarla o inquietarla. Si bien vemos que su entorno familiar acompaña y ayuda (un padre comprensivo al máximo, una madrastra de las más buenas y una dulce hermanita menor) la vivencia de su gestación y el compromiso de entregar a su bebé son mostrados con cierto sarcasmo, a veces poco creíble. De hecho, en la escena de la confesión del embarazo, los padres se tranquilizan al saber que la menor no ha sido expulsada del colegio.
Es notoria, en los diálogos, la pluma de Diablo Cody, la treintañera guionista, a la que, por momentos, parece costarle ponerse en la piel de esta adolescente de dieciséis; así y todo, fue la única en recibir el Oscar (Page, Reitman y el filme estaban también nominados). En un momento aparece algo de sensatez cuando, también de la boca de la rebelde Juno, escuchamos: "Me estoy encargando de cosas que van más allá de mi madurez".
Al margen de la ironía reinante en todo el filme, hay muchos detalles interesantes, simpáticos, naif y hasta tiernos: uno de ellos es cuando Vanessa se cruza con la muchacha en un shopping y le habla a su futuro bebé, arrodillándose ante la panza de una Juno que, por primera vez, vemos algo más frágil y con un dejo de afecto en su mirada. A partir de aquí cierta vulnerabilidad va ganando el estado de ánimo de la joven encinta y de toda la película, generando un happy end con mucha ternura y también algunas lágrimas. "Terminó con una silla", dice Juno, otra vez en off, haciendo alusión ahora a la silla mecedora en la que Vanessa seguramente hará dormir a su bebé.
Con una colorida puesta en escena, otros detalles atractivos antes aludidos son: los créditos animados del inicio; los jóvenes gimnastas trotando, que abren o cierran cada secuencia; la actuación del joven Michael Cera como el cuasi-tonto Bleeker; la música de Matt Mesina y las canciones de The Moldy Peaches, The Velvet Underground o Mott the Hoople.
A pesar de lo apuntado sobre el perfil del personaje principal, Juno (el personaje y la película) no serían lo que son de no contar con la espontaneidad y mordacidad de Ellen Page, previamente vista en "X-Men 3" o "Hard candy". Su brillante rostro y su chispeante voz le dan una gran simpatía y también ternura a esta jovencita que, a pesar de mostrarse algo superada, puede llorar cuando acaba de dar a luz, puede demostrar su amor por el joven Bleeker y puede subirse a su bicicleta y seguir siendo lo que es. Ni una niña, ni una mujer: simplemente Juno.
Juno sin duda es de mis películas favoritas, está muy bien hecha tiene cierto tipo de coemdia negra y creo que es de esas películas que puedes ver una y otra vez, justo vi en HBO programación que la están pasando y quien no la ha visto, hágalo porque es buenísima.
ResponderEliminarSúper disfrutable este filme!! Gracias por el comentario. Slds.
ResponderEliminar